OchoCincuenta - Granada, Granada

Pablo A. G.

Tenia bastante gente y la subida del "hotel" bastante fea y pobre, la terraza era bonita y con buenas vistas pero tenia mesas un poco mal situadas, ademas de pocas mesas. El personal muy simpático y agradable. De precios es lo normal a cualquier terraza de granada.

Maribel G.

Es la primera vez que íbamos y nos gustó un montón, un ambiente agradable, con unas vistas bonitas. Pedimos rooibos de maracuyá y estaba muy rico, muy recomendable. Volveremos otro día!

Alejandro I.

Me salvó la vida al ser la única cafetería que me encontré abierta en domingo de camino a la estación de autobuses.

Sitio acogedor con un poco de todo. Muchísima variedad de cafés (solo hay que ver los carteles dentro), ¡y además no lo sirven hirviendo! Por si fuera poco me sirvieron la tostada ya untada, lo cual me sorprendió muchísimo.

Dejaron entrar a un par de chicas que llevaban un perro muy bien educado que se quedó en el sitio sin rechistar, lo cual para mi siempre es un plus.

Marina L.

Entramos de casualidad, el café buenísimo y el gofre también. Los precios muy económicos, la atención perfecta. La única pega es que el chico que nos atendió parecía que también era al mismo tiempo el recepcionista del hotel y tuvimos que esperar un poco.

Andres A.

Me gusto la terraza, tengo algo que decir referente al servicio, pedimos una tarta de queso que nunca llegó y la querían cobrar, se pudo solucionar sin embargo estar más atentos a esto, la vista muy normal y las instalaciones pueden mejorar.

jose D. C. B.

El mejor café que he tomado en Granada, vine por recomendación y fue todo un descubrimiento. Puedes desayunar por 2€ y Te dan la posibilidad de tomartelo en la azotea, las vistas son increibles a la Alhambra y la catedral. 100% recomendable

Vanessa L.

No me gustó para nada la experiencia.
Tuvimos que esperar a que nos atendiera la única persona que había allí, la cual estaba atendiendo al teléfono del hostel (sin exagerar más de 10 minutos). No le di importancia al principio, pero después cuando ya nos atendió (preguntando qué queríamos tomar), llamó por teléfono para trasladar una queja que le había llegado de alguna habitación (lo escuchamos todo porque estábamos solos, y en un momento de la conversación salió a fumar mientras hablaba), por lo que, nos volvió a hacer esperar, cuando ya habíamos pedido.

Cuando finalmente nos sirvió las bebidas (té matcha latte), sabía fatal, como a pescado, uno de ellos tenía espuma y el otro no.

En definitiva, dudo volver...

Carlos V.

Me arrepiento de no haber conocido esta terrazita antes, esta super bien, no tiene precios desorbitados, vistas muy buenas, buena carta y buen personal